Luego de ser acusado por abusar sexualmente de su hija, Roberto Henaine Buenrostro, hijo del ex dueño del club Puebla, enfrenta un proceso penal ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, informó el periódico La Prensa.
Aún sin que el diario diera a conocer los nombres de los personajes involucrados, en Twitter, la cuenta @c4jimenez difundió que presuntamente se trataría del empresario. https://twitter.com/c4jimenez/status/1360050948761128963
El caso se registró por la autoridad bajo el expediente CI-FDSFDS-6/UI-FDS-6-02/01110/11-2018 desde el 6 de noviembre de 2018, después de que la madre de la afectada se percató de las violaciones, pues habrían comenzado desde que ella se quedó con la custodia de la pequeña, tras divorciarse del ahora imputado en 2016.
De acuerdo con los artículos 177 y 181 Bis del Código Penal de la CDMX, el delito por el que Henaine Buenrostro fue denunciado se castiga hasta con 20 años de prisión; no obstante, junto con él se señaló a su padre, Ricardo Henaine Mezher, también conocido como empresario en el mundo textil.
En la descripción de los hechos se especificó que además de sus familiares, un menor y otra persona participó en las situaciones de abuso, por lo que la niña ha vivido momentos de ansiedad, miedo e irritabilidad, entre otras alteraciones psicológicas.
El pasado 8 de julio fue requerida la imposición de prisión preventiva oficiosa en contra de Henaine Buenrostro por parte de la defensa de la víctima.
Pese a que se encontraron elementos suficientes para citar a Henaine Buenrostro a una audiencia inicial ante un juez de control, el imputado se excusó para faltar el 20 de octubre pasado al argumentar que esperaba una segunda prueba de Covid-19, ya que había dado positivo en fechas anteriores y, según dijo, aún persistían los síntomas.
Sin embargo, aún no se asigna un nuevo día para continuar con el proceso, debido a que los juzgados no han reiniciado actividades tras el regreso a semáforo rojo.
En paralelo, tanto Buenrostro como Mezher encaran averiguaciones, pero por lavado de dinero en la Fiscalía General de la República (FGR). Dichas indagaciones comenzaron después de que ambos fueron anotados dentro de la carpeta integrada por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
En el documento se describieron diversas operaciones en el extranjero, así como el movimiento de montos muy por encima de lo declarado. En el caso de Roberto transaccionó 208 millones 356 mil pesos mediante el uso de tarjetas de crédito American Express entre diciembre de 2013 y febrero de 2020; mientras que Ricardo, su padre, lo hizo con 125 millones de pesos entre 2018 y 2020, también con estos plásticos.
Comments