A días de formalizarse el cambio de legislatura en Jalisco el 1 de noviembre, el regidor morenista, Carlos Lomelí Bolaños, detalló que los legisladores salientes autorizaron el mayor endeudamiento que ha tenido la entidad en su historia, al permitir que se empeñara el estado con un crédito de 5,250 millones de pesos y luego aprobar otra deuda por 6,300 millones con el pretexto del Covid-19.
“El manejo económico en Jalisco no sólo fue irresponsable sino desastroso, pues los legisladores aumentaron la bolsa para “engordar la burocracia” que tienen a su servicio y cambiaron las reglas para repartir posiciones del Consejo de la Judicatura entre sus conocidos, así como para nombrar a ocho magistrados del Supremo Tribunal”, dijo.
Entre estos nombramientos estaban colaboradores cercanos al gobernador Alfaro y hasta el cuñado de un legislador del PAN, precisó.
A través de un video Lomelí Bolaños festejó que está cerca el cambio de legislatura en Jalisco pues aseguró que, salvo honrosas excepciones, los diputados y diputadas salientes se convirtieron en instrumento del poder y sirvieron como instrumento de ataques para acallar a los críticos y someter cualquier contrapeso.
“No fueron representantes populares”, expuso el también excandidato por Guadalajara y acusó que los legisladores salientes estaban entregados a los caprichos del gobernador Enrique Alfaro, a quien servían como “alfombra”.
Sostuvo que la LXII legislatura difícilmente podrá ser superada por su nivel de escándalo, por su incapacidad para hacer un equilibrio del poder y por su falta de pudor democrático, recordó que los diputados que hoy dejan su responsabilidad fueron los que desaparecieron el Instituto Jalisciense de las Mujeres, donde éstas eran atendidas y recibían apoyo.
Asimismo, dicha legislatura aprobó varias reformas que se tuvieron que corregir desde la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y que además se dedicó a limpiar decenas de cuentas públicas de municipios plagados de corrupción.
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